Clemencia de Vida

Oh, madre mía
En qué momento me soltaste
Y nos perdimos por diferentes destinos
En qué segundo me dejaste
Y yo no me di cuenta
En qué instante no comprendí que era yo
La que estaba aferrada a ti
Pero tú ya no me tenías en tu seno
Por eso te pido clemencia
Para mi existencia ingrata
Óyeme no te niegues a mis palabras de petición
Y abre tus manos y deja que caiga en tus mansos dedos
No me dejes que este otoño seque mis hojas
Y me deje vacía en este suelo de la nada
Flotando sin rumbo alguno
Dame tu agua para poder calmar mi sed
Te pido que me devuelvas mis raíces, mis hojas
No dejes que este roble se caiga
Ayúdame, te ruego
No dejes que sea una presa más para la muerte
Por favor no me dejes sola
Luchando contra mi suerte
Se tú madre hermosa
Quien me libre de las garras de la muerte.

Karla Vargas Alvarado
3º año de secundaria
I.E. Nº 81526 – Santo Domingo - Laredo